Cera de soja vs. parafina: ¿Cuál es la mejor opción para tus velas?

¿Estás a punto de crear tus propias velas, pero te has quedado atascado mirando las distintas opciones en tu carrito de compra? No estás solo. El debate entre la cera de soja y la de parafina es, probablemente, el tema más discutido entre los artesanos de velas. ¿Es la parafina realmente la villana que pintan algunos blogs? ¿Es la soja siempre la mejor opción para un producto ecológico?

La respuesta no es blanca o negra. Ambos materiales tienen su propia personalidad, ventajas y modo de empleo. Tanto si buscas un aroma que inunde toda la habitación como si prefieres una vela con etiqueta «bio», la elección de tu cera para velas determinará el resultado final. A continuación, analizamos los hechos para que puedas tomar la decisión correcta para tu proyecto.

Salud y seguridad: la verdad sobre las emisiones

En internet se cuestiona mucho la seguridad de la parafina por ser un subproducto de la industria petrolera. Si bien es cierto que deriva del petróleo, esto no significa automáticamente que quemarla en casa sea peligroso. Las investigaciones científicas demuestran que, en términos de emisiones químicas, la cera de soja no quema necesariamente más «limpio» que otros tipos de cera. La parafina, la soja y la estearina sin perfumar producen emisiones comparables. A menudo, son los aceites aromáticos añadidos los que influyen más en la calidad del aire que la cera en sí.

A lo que sí debes prestar atención es al hollín. La cera de soja tiende naturalmente a producir menos. Sin embargo, el humo negro en las velas suele deberse a la mecha y no directamente a la cera. Una mecha mal elegida (demasiado gruesa o mal cortada) provoca una combustión incompleta, generando ese molesto humo. Si pruebas bien tu mecha para velas y la ajustas correctamente al recipiente y al tipo de cera, puedes lograr una combustión limpia con ambos materiales.

Sostenibilidad y medio ambiente

En el terreno de la sostenibilidad, la cera de soja suele ser la ganadora para el fabricante con conciencia ecológica. Se elabora a partir de granos de soja, una fuente renovable y biodegradable. La parafina, por el contrario, es un combustible fósil y no es biodegradable.

Si tu marca o pasatiempo gira en torno a una imagen natural, la soja es la elección lógica. Una vela de soja tiene una huella de carbono muy baja durante su combustión. Aunque la industria de la soja también enfrenta desafíos respecto al uso del suelo, para muchos creadores resulta más gratificante trabajar con un producto de origen vegetal.

Difusión del aroma: *hot throw* y *cold throw*

Aquí es donde el tema se pone interesante para los amantes de los perfumes de hogar. Buscas que tu vela huela bien cuando está apagada (*cold throw*), pero sobre todo cuando está encendida (*hot throw*).

La parafina es conocida por su potente difusión del aroma. La estructura cristalina de la parafina retiene muy bien el aceite aromático y lo libera con facilidad durante la combustión. ¿Buscas esa explosión de olor intensa que llene un salón grande? Entonces la parafina (o una mezcla que la contenga) suele ser el camino más directo al éxito.

La cera de soja ofrece una difusión más sutil y requiere más paciencia. Mientras que con la parafina a menudo puedes probar la vela a los pocos días, la cera de soja necesita tiempo para curarse (*curing*). El aceite aromático debe unirse a nivel molecular con la cera. Para obtener el mejor resultado, deja reposar una vela de soja de 1 a 2 semanas antes de encenderla. ¿Quieres saber más? Lee cómo crear aromas de vela duraderos.

Facilidad de uso y apariencia

Para los principiantes, la cera de soja puede ser un poco caprichosa. Al ser un producto natural, a veces se solidifica con una superficie rugosa o con manchas blancas, un fenómeno conocido como *frosting*. Esto no afecta la combustión de la vela, pero algunos creadores prefieren un acabado más pulido. La parafina, por lo general, queda lisa, brillante y uniforme al solidificarse.

¿Acabas de empezar? Solemos recomendar iniciarse con velas en recipientes (vasos). Así no tendrás que preocuparte de si la vela mantiene su forma sin el cristal. Asegúrate de que tus recipientes de vidrio estén limpios y a temperatura ambiente antes de verter la cera para evitar grietas o que se despegue de las paredes (*wet spots*).

También puedes optar por lo mejor de ambos mundos: las mezclas (*blends*). Una mezcla de soja y parafina puede ofrecer el aspecto cremoso de la soja con la potencia aromática y estabilidad de la parafina. Además, existen mezclas especiales para *wax melts* que endurecen más y se desmoldan con facilidad.

¿Qué cera se adapta a tu proyecto?

No hay una elección incorrecta, solo la que mejor se adapta a tus objetivos específicos.

• Elige cera de soja si: Quieres hacer un producto ecológico, te gusta una combustión más lenta y valoras una apariencia suave y cremosa. La Golden Wax 464 y la NatureWax C-3 son opciones muy populares.
• Elige parafina si: Buscas la difusión de aroma más potente posible, quieres hacer velas de molde (velas independientes) que necesiten endurecer bien, o si trabajas con colores vivos (en la soja los colores suelen quedar más pastel/apagados).
• Elige arena de vela o mezclas si: Quieres empezar de inmediato sin fundir cera (en el caso de la arena) o buscas propiedades específicas como en los *wax melts*.

Sea cual sea la cera que elijas, el secreto de una buena vela está en las pruebas. Experimenta con diferentes mechas, juega con el porcentaje de aroma y vigila el tiempo de combustión. Como explicamos en nuestros consejos para fabricantes de velas principiantes, la paciencia es tu ingrediente más importante.

¿Listo para empezar? Echa un vistazo a nuestro surtido completo para hacer velas y descubre qué material se convertirá en tu favorito.